Recién cumplidos los 6 años y hasta 1972 asistí a la misma escuela y la verdad es que me gustaba.
Las niñas llevábamos una bata blanca como uniforme,pero los niños no tenían que llevar ningún tipo de vestimenta especial.
Como ya sabéis,los niños y las niñas no íbamos al mismo centro escolar,aunque creo recordar que en mi primer año los niños si estaban en Gudín.
Durante la jornada escolar teníamos unas horas de cultura general(matemáticas,historia,geografía,lenguaje,religión,..)y otras de labores,manualidades,gimnasia...
Nosotras(las alumnas)limpiábamos el aula dos veces por semana y el resto de los días un grupo(de alumnas,que la maestra escogía) barría y limpiaba el polvo durante el recreo;no en válde se nos educaba para ser amas de casa.
La media hora de recreo era apoteósica,pues la aprovechábamos jugando cada segundo.Multitud de juegos que según crecíamos íbamos cambiando y que por temporadas se ponían de moda.
cromos de palma |
cromos de palma tal como los comprabamos |
trozo de ladrillo o un cacho de yeso y que jugábamos con una lata de betún rellena de piedrecitas y el corro,las adivinanzas,
cambiar cromos de un álbum muy de moda por entonces,las muñecas recortables con sus vestiditos,la comba,sangre,a la zapatilla por detrás...Madreee,creo que es suficiente como ejemplo.
La única actividad extraescolar a la que podíamos optar en el colegio,pues no había otra, eran las clases "particulares" que impartía la maestra y suponían 150 pesetas mensuales.
Durante 1 ó 2 años el desplazamiento lo hacíamos a pie,más tarde pusieron autobuses que recogían a l@s niñ@s en los barrios para llevarnos a la escuela.El horario era partido,los sábados por la mañana teníamos clase,pero el jueves por la tarde descansábamos.
El autobús,por supuesto,se adecuaba al horario de aquellas clases particulares y si no asistías a dichas clases,pues te ibas a casa a patita o te quedabas una hora esperando.
De vez en cuando pasaban cosas pintorescas en la escuela.
La actuación de un mago(ilusionista).Nos pedían un duro(5 pesetas)y pasábamos toda una tarde de entretenimiento.
Alguna vez venía un inspect@r de educación y teníamos que portarnos muy bien y responder a sus preguntas.
También el cura paso alguna tarde... y algún fotógrafo....
Terrible era cuando venían a vacunarnos y estábamos todas alborotadas y muchas llorando.Yo tengo la señal de dos vacunas.
Pero la anécdota más sorprendente fue el día en que tuvimos que salir por las casas, ayudando a las familias a rellenar el impreso del censo...me lo pasé muy bien.
En el colegio no teníamos calefacción.Una estufa de butano calentaba a duras penas el aula.
Muchos días de invierno llevábamos zapatillas y "madreñes" para tener los pies mas calentitos,pero en el recreo no podíamos correr y dejamos de usar "les madreñes",que tampoco eran "glamurosas"y ya teníamos una edad..."la edad del pavo"la llamaban.
Así,mas ó menos,estaba la entrada del colegio los días de lluvia.
Estas, encontradas en la red,son más modernas en diseño
Para l@s que no querían o no podían estudiar, era la forma de aprender un oficio, y también de sacarse unas "perrillas" para poder ir al cine y salir con los amigos.
Pero mientras todo esto ocurría en mi vida escolar,en Trasona, un hermoso valle que cambiaba a toda velocidad,también sucedían cosas muy importantes que ahora voy conociendo a través de toda la información que la red pone a nuestra disposición.
No dejéis de pinchar en el enlace,cuentan cosas interesantes.
Os deseo un feliz día y que mi rinconcito os haya hecho pasar un buen rato.
Me ha encantado este relato, Flor, yo también jugaba esos juegos, sólo que lo hacía en la calle, pues no asistí a escuela pública hasta los once años que fui al colegio de las monjas.
ResponderEliminarTambién tengo cromos comprados de ahora y unas mariquitas inglesas que las compré para mi hija, pero que en realidad eran para mí, para revivir mi infancia.
Gracias.
Un beso, guapa!
muy bonitooooooooooo.me encanta.me encanta como escribes mama.eres guay.muakkkk.te kiero mucho.
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